¡¡Los cachorros y sus diminutos dientecitos!! ¿cómo algo tan pequeño puede morder tanto y todo? ¿Es normal? así empiezan muchas de las conversaciones que tengo con los propietarios que tienen un cachorro en casa y mi respuesta siempre es afirmativa...SI ! totalmente normal....bienvenido al mundo del cachorro!
Tranquilo/a, aunque sea normal y tu estés mirando a tu cachorro como si fuera una “grapadora con patas “ no va a ser así toda la vida, hoy hablaremos de esta etapa de desarrollo de los perros “la exploración oral “ , que es y como sobrevivir a ella.
La exploración oral
es una etapa (entre las 10-12 semanas) donde el cachorro lo explora todo con su boca , así “ se hace la idea” del mundo que le rodea...y se acentúa con el cambio de dientes por molestia de los mismos. También es una necesidad natural, morder les relaja.
¿Cómo abordar el tema?
Juguetes! variados y de diferentes tipos y texturas!
Proporcionarle juguetes para mordisquear, no hace falta que llenes la casa de juguetes, proporciona un par o tres y guarda el resto, a los días haz intercambio de juguetes y así mantienes el efecto “novedad” para que los juguetes mantengan su valor y no se aburra con ellos.
Juguetes rellenables tipo Kong, dale su ración de pienso repartida en este tipo de juguetes, a demás de entretenerles mucho les cansa.
Cuando esté mordisqueando algún mueble, no lo regañes o vayas. Coge un juguete y muévelo cerca o hazlo rodar, verás como le llama la atención deja el mueble y va hacia el juguete.
Si te muerde las manos o pies, quéjate con un gran “ay “ y retíralas , para lo que estés haciendo (jugar, caminar...) puedes volver a reanudar la actividad cuando se relaje, si insiste marcha de la habitación (cierra la puerta para impedir que te siga si es necesario) . Si nuestro cachorro muerde de forma frenética y además se excita al hacerlo ,es necesario calmarlo, revisa en que momentos se sobrexcita. Ojo
con los juegos demasiado excitantes y poco controlados que pueden desencadenar en estos comportamientos.
Proporcionarle tiempo de masticación
(huesos, pieles, orejas....) adecuadas a su edad y tamaño, el morder y roes es algo totalmente natural en la estimulación de nuestros perros y debemos suplir esa necesidad de manera adecuada.
Poco a poco (y con mucha paciencia por nuestra parte) nuestro cachorro entenderá la fuerza de su mandíbula y empezará a tener autocontrol sobre ella, jugar con otros perros (adecuadamente) también le ayudarán a darse cuenta de ello.
Paciencia esta etapa se acaba y podrás decir con humor “ yo sobreviví a un cachorro” ;-)